Fue uno de los músicos que reinventaron el instrumento de cuatro cuerdas. Se hundió en las drogas, pero dejó un legado imborrable.
John Francis Anthony Pastorius III nació un 1 de diciembre pero de 1951. Como su madre no quería que se llame igual que su padre lo rebautizó como Jaco Pastorius, nombre bajo el cual se ganó su fama por ser uno de los bajistas más virtuosos de la historia.
Reconocido por ser un maestro en técnica y ejecución del instrumento, Pastorius descubrió facetas de las que nadie sabía, desde el aprovechamiento de armónicos, el fretless (bajo sin trastes) y el uso de todo el diapasón para crear composiciones revolucionarias.
Inspirado por su familia, Jaco se convirtió en un aficionado de jazz e intentó comenzar con la batería, aunque una dura lesión de muñeca -obra divina del destino- lo ubicó detrás de las cuatro cuerdas. Se destacó en sus diferentes bandas, como Weather Report (1976-1981), Wayne Cochran y los CC Riders, Blood, Sweat & Tears y su propio grupo, Word of Mouth.
Sin embargo, las malas llegaron para Pastorius. Primero, su pelea con el líder de Weather Report, Joe Zawinul, la cual lo alejó de la banda. Luego, se divorció de Tracy Lee, con quien se casó a los 18 años y con quien tuvo tres hijos. Ambas situaciones provocaron que resuelva sus males con drogas y alcohol, y la adicción, sumado al gran deterioro mental que tenía -en 1982 fue diagnosticado como maníaco-depresivo- lo llevaron hacia lo más oscuro.
Vida de vagabundo y peleas en bares, a eso se había reducido uno de los bajistas más brillantes de todos los tiempos. El 11 de septiembre de 1987 llegó lo peor. Pastorius acababa de salir de prisión, donde estuvo un mes por conducir un auto robado por una vereda, gracias a una enigmática fan alemana de nombre Ute, quien le pagó la fianza. Aquel día ideó un plan para conquistar a su ex pareja, Teresa Nagell, en el cual primero la invitaría junto a su pareja a un show de Carlos Santana.
Esperaba que lo inviten al escenario y tocar un solo para enamorarla, aunque lo que sucedió fue todo lo contrario, ya que él mismo se había boicoteado sus propias ideas. Borracho, subió al escenario del Sunrise Music Theater, del cual fue echado al instante. De ahí se dirigió hacia otro local, donde interrumpió en reiteradas ocasiones a la banda de turno que estaba tocando. El resultado fue el mismo, por lo que intentó una locura más.
Pasada las 4 de la mañana, irrumpió en el Midnight Bottle Club y no lo querían dejar pasar. Esto llevó a una discusión con Luc Havan, empleado del local y cinturón negro de karate. La diferencia fue abismal, y Havan dejó en coma a Pastorius, con fracturas en el rostro y otras partes del cuerpo dañadas. Tras estar en este estado por unos días, sufrió un derrame cerebral y su vida acabó abruptamente a los 35 años. Havac, que fue condenado a cinco años de cárcel, solo estuvo cuatro meses encerrado.
Fuente: Ámbito