Fue uno de los cantantes de reggaeton más escuchados, pero hoy se consagra a Dios.
Cuando las estrellas de la música llegan a la sima, en algunos casos, todo ese glamour que se ve frente a las cámaras puede no ser tan real. En la televisión y en los escenarios Héctor “El Father“, era uno de los nombres más grandes del reggaeton. Sin embargo, su vida detrás del telón era un caos,
Envuelto en diversos escándalos y sin poder salir de ellos, El ex reggaetonero tomó una de las decisiones más importantes dejando atrás un estilo de vida lleno de excesos y problemas legales, para empezar de cero y busca compartir su historia de redención y paz interior con el mundo.
Héctor Delgado comenzó su carrera en el reggaeton en la década de los 90, alcanzando la fama rápidamente junto a Tito “El Bambino“. Sin embargo, a medida que su éxito crecía, también lo hacían los problemas en su vida personal. El cantante vivía inmerso en un mundo de infidelidades, violencia y depresión, y aunque era uno de los más populares en la industria, su vida estaba lejos de ser feliz.
En 2008, mientras enfrentaba serias acusaciones legales, el reggaetonero decidió hacer un cambio drástico en su vida. Abandonó su carrera musical y se dedicó a predicar el Evangelio. Desde entonces, ha rechazado numerosas ofertas millonarias para regresar a los escenarios, defendiendo su decisión de vivir una vida acorde a sus nuevas creencias.
Hoy en día, “El Father”, utiliza las redes para advertir a los jóvenes sobre los peligros del estilo de vida que él una vez llevó y para promover un mensaje de esperanza y fe. Su transformación es una de las más notables en la industria de la música, dejando atrás la fama temporal por lo que él considera una paz eterna.
Fuente: Ámbito